La importancia de prevenir

Lo más importante es tener en cuenta que el tiempo entre el primer síntoma o sospecha de que se trata de un ACV y la atención médica en un centro de salud no debe ser mayor a 3 o 4 horas.
Estar informados sobre cómo actuar, es la diferencia entre la vida y la muerte o en el grado de gravedad de las secuelas que deje la enfermedad en la persona que la sufre.
El Dr. Francisco Klein de la Fundación Favaloro, explicó “Frente a cualquier manifestación que sugiera un ACV hay que concurrir de inmediato a un hospital, donde luego de un rápido examen neurológico se realizará una tomografía computada o una resonancia magnética”
En el Congreso Mundial de Cardiología 2014, se mencionaron como factores de riesgo que aumentan la posibilidad de sufrir un ACV, entre los que están: la hipertensión arterial, el colesterol alto, el tabaquismo, el sedentarismo, la obesidad, los problemas cardíacos, el consumo excesivo de sal y de alcohol, la diabetes, el stress y la depresión.
En la actualidad los estudios médicos demuestran que se puede prevenir un ACV, los consejos que dan los expertos son:
· Hacer un chequeo médico completo, que permita evaluar al paciente y determine si tiene alguno de los factores de riesgo, para poder tratarlos lo antes posible.
- Hacer actividad física.
- · Llevar una vida ordenada.
- · Hacer una dieta adecuada.
- · Controlar el peso
- · Falta de fuerza o debilidad muscular.
- · Ceguera.
- · Adormecimiento de las extremidades (Hormigueos).
- · Dificultad en el habla.
- · Pérdida de Equilibrio
- · Desviación de la comisura labial.
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